Los antropólogos estudian los huesos de las excavaciones y intentan explicar nuestra procedencia. Nuestros ancestros eran cazadores recolectores y andaban erguidos.
Las pruebas científicas localizadas en los distintos yacimientos demuestran que emigramos del continente africano. Nuestros antepasados eran inteligentes y construían sus propias herramientas.
Hoy en día todavía existen numerosas tribus que continúan viviendo de manera diferente a nosotros, no civilizada pero sí ordenada. Las mujeres recolectan plantas, los hombres cazan, no tienen jefes, nadie está por encima de nadie, y la modestia es una virtud. Tan solo poseen arpas y algunos collares, lo material no es excesivamente relevante en estas tribus. La supervivencia de estos grupos reducidos son un ejemplo de como podríamos haber evolucionado de los homo erectus del pasado.